lunes, 19 de octubre de 2015

Aristóteles - Breves tratados sobre naturaleza (Parte III: La vida, la edad y la respiración).

No es un tratado que tenga un contenido estrictamente filosófico, pero por medio de la explicación científica que nos brinda, podemos reflexionar sobre la vida y su duración. Por lo demás, la brevedad de la vida es una preocupación inquietante ya sea para los más cultos como para los menos instruidos. En esta sociedad actual hacemos todo para preservar y conservar nuestra especie, aún a cuesta de nuestros propios semejantes. No obstante, también hay personas que se entregan a los placeres excesivos que da la vida, acortándola en un sentido, pero disfrutándola en otro. En fin, veamos lo que el estagirita quiere decirnos con la longevidad, la juventud, la vejez y la brevedad de la vida.

Definiciones:

(1) Tallo que se separa de una planta para luego plantar otra a partir del mismo tallo. 
(2) Ovíparos: animales cuyas hembras ponen huevos. Por ejemplo, las aves, las ranas y los reptiles.
(3) Vivíparos: animales cuyas hembras tienen su cría dentro del cuerpo. Por ejemplo, los mamíferos. 

Referencias:

(1) Se dice que Aristóteles entendió mal este pasaje, pues muchos otros autores consideran que Empédocles decía que la respiración se producía por los poros. 
(2) Hoy se ha demostrado que las abejas viven solamente 45 días, los zánganos tres meses y la abeja reina cuatro o cinco años.
(3) En su etapa de larva, los tritones tienen branquias, pero ya en su etapa adulta desarrollan los pulmones.




BREVES TRATADOS SOBRE NATURALEZA


TRATADO VI: 
ACERCA DE LA LONGEVIDAD Y DE LA BREVEDAD DE LA VIDA


Es fácil ver que existen animales que tienen una existencia corta y otra más longeva. Evidentemente, hay cosas externas que hacen que el tramo de vida se acorte y se experimente la muerte mucho antes de lo esperado. Entre todos ellos, el hombre es el más longevo de los animales de acuerdo con Aristóteles, aunque también nos dice que algunos hombres viven menos en los ambientes fríos que en los cálidos. 

Causas de la destrucción

En el tratado ''Acerca de la generación y de la corrupción'', vimos que la generación y la destrucción se daba en los cuatro elementos básicos. Por lo tanto, lo que está compuesto de fuego, agua, tierra y aire, está propenso a destruirse en algún momento a menos que dicho objeto sea un tipo de combinación. 

Una cosa puede destruirse siempre y cuando tenga un contrario. También puede destruirse de manera accidental, pero si lo hace así, la generación también debe ser accidental. 

La longevidad de los animales

No porque los animales sean grandes tienen más años de vida, de hecho, el caballo tiene menos longevidad que el hombre, pero los animales pequeños (o insectos) tampoco tienen más años que los grandes, puesto que muchos de ellos tienen existencia anual (algunas plantas por ejemplo). 

No obstante, hay algunas plantas que son muy longevas, por ejemplo, la palmera. Luego están los animales de sangre (hombres o elefantes) que viven muchos más que los que no la tienen (insectos). 

Causas de la longevidad

Aristóteles hace una relación lógica entre lo que es cálido y húmedo; frío y seco. La vida es cálida y húmeda, mientras que la muerte o el envejecimiento es fría y seca; y todos los animales tienen estas cuatro características en el cuerpo. 

Vida: calor y humedad 
Muerte: fría y seca 

Bajo esta analogía podemos decir que la vida, siendo húmeda, a medida que vamos envejeciendo se va secando. Lo húmedo no debe ser fácil de secar porque eso significaría que la vida se iría acabando más rápidamente. 

En general, los animales más grandes, así como también las plantas, suelen ser las más longevas porque es obvio que lo más grande tenga más humedad. La verdad es que, de un modo más específico, la cantidad y la cualidad de lo húmedo y cálido deben ser proporcionales y firmes para que el animal se mantenga vivo. 

Una cosa que hace a los animales envejecer más son los residuos. Es importante que la vida del animal no genere muchos residuos, pues su vida se acortará más. Por ejemplo, los animales que se aparean mucho pierden su longevidad, al dejar residuos húmedos (semen); otra razón sería la fatiga, ya que produce sequedad. Es así, según Aristóteles, que los gorriones machos son de vida más larga que las hembras. Muchos de estos ejemplos lo han llevado a afirmar que el macho en general es mucho más longevo que la hembra.

Recordemos que al principio habíamos afirmado que los hombres que viven en climas más cálidos, viven mucho más tiempo. Por otro lado, lo cálido es causa de el crecimiento y de la vid de los animales, mientras que los que viven en el frío tienen una vida más corta, además de que lo frío impide el crecimiento. De esto se puede desprender fácilmente que los animales terrestres viven más que los acuáticos. 

Los árboles y las plantas

Pareciera ser que las plantas son más longevas que muchos animales. La humedad de las plantas no es fácil de secar, además de que son algo viscosas. En cuanto a los árboles, muchos de ellos son longevos por la continuidad de vida que se da en sus cuerpos, es decir, el árbol tiene ramas y en ellas se dan muchas más. 



TRATADO VII:
ACERCA DE LA JUVENTUD Y DE LA VEJEZ, DE LA VIDA Y DE LA MUERTE, Y DE LA RESPIRACIÓN

Planteamiento: animal y ser vivo

Una de las cosas fundamentales para que vivan algunos animales es su respiración. No podemos colocar en este mismo sentido a las plantas, pues ellas no poseen sentido y en efecto, la respiración sí lo es. Este puede ser un acercamiento de lo que hace que un animal pueda vivir. Por otro lado, el órgano de la sangre (el corazón) es también importante, pues es él el que mantiene o puede poner fin a la vida si se le daña. Y junto con el cuerpo muere el alma también. 

Partes del animal

Todos los animales dividen su cuerpo en tres partes; la primera es la de alimentación, la intermedia es el torso y la última es donde expulsan el residuo. Para Aristóteles, la parte del torso tiene que ver con al facultad nutritiva. Podríamos pensar que es más bien la primera la que tiene más relación con ésta facultad, pero pasa que a algunos animales se les quita la cabeza y su parte nutritiva no se detiene. 

Seres divididos que siguen viviendo

Muchos insectos pueden en efecto, vivir sin tener alguna parte de su cuerpo al igual que las plantas. Esto ocurre debido a la parte nutritiva que aquellos tienen. De esto también se desprende que la parte dividida en insectos y plantas tienen sensación. 

Generación de las plantas

La parte donde se encuentra la facultad nutritiva es también responsable de la generación de las plantas. La semilla y su germinación ocurre en le parte central de cada planta, por lo cual se deduce el nacimiento desde su facultad nutritiva. 

De hecho, para que nazca una nueva planta es necesario cortar su esqueje(1) y luego plantarla. Cuando esta es plantada es fácil ver como se produce el crecimiento desde el centro; de ahí crece la raíz y el tallo. 

Papel del corazón

Entre los animales que tienen sangre, el corazón es lo primero que se desarrolla. Dicha parte de los animales también se encarga de otras acciones como la alimentación y las sensaciones. También hay otros sentidos como el gusto y el tacto, pues estos no tienen medios como el aire. 

Por lo tanto, si en el corazón reside la causa de las sensaciones y la alimentación, entonces en el corazón también reside la vida de los animales. 

El corazón y el calor natural

Queda claro entonces que la parte sensitiva y nutritiva del alma se encuentra en el corazón, el está en la parte intermedia del cuerpo, el torso. 

El corazón es necesariamente cálido, pues como vimos anteriormente, lo cálido y lo húmedo es lo que da vida a los seres, mientras lo seco y lo frío los mata. 

Podemos observar además, que cuando una parte del cuerpo que no es el corazón, el cuerpo persiste en vivir, pero cuando el corazón se vuelve frío y seco, entonces el cuerpo muere inmediatamente. La muerte representa el frío del cuerpo.


Formas  de destrucción del fuego y del calor

Según Aristóteles, hay dos formas en que el fuego puede destruirse: por consunción y extinción. La primera se da por la destrucción de sí misma y la segunda por una causa exterior. 

Extinción

Esta destrucción se da por una razón: la falta de alimento. Es el alimento el que produce calor en los cuerpos y sin él, el cuerpo perece.

Consunción

Normalmente ocurre cuando el cuerpo tiene un exceso de calor en el cuerpo, y éste no puede ser expulsado a través de la ventilación o refrigeración. 

Refrigeración del ser vivo

La refrigeración del ser vivo permite que éste se conserve por mucho tiempo. Podemos ver esto en el carbón. Cuando un carbón está encendido pero se le pone un medio para refrigerarlo directamente, el carbón rápidamente se apaga, no obstante, si ponemos este medio refrigerante una vez y luego se quita y se vuelve a poner, entonces el carbón puede durar un poco más. 

El calor natural y el entorno

Es la alimentación de los animales lo que permite que estos se puedan refrigerar. Es importante que el calor natural se combine con el entorno (o los medios) presentes en la misma naturaleza. Muchos animales se refrigeran debido al aire o al agua. 

La respiración

Aristóteles nos dice que los antiguos afirmaban que todos los animales respiraban, pero según él ésto es un desacierto y lo veremos en lo sucesivo. 

Importancia del pulmón

Todos los animales que tienen pulmón respiran, pero los que tienen pulmón sin sangre y esponjoso no necesitan tanto de la respiración como los otro, lo que los hace a estos últimos mucho más resistentes con la respiración bajo el agua. Por ejemplo, los ovíparos(1) tienen el pulmón esponjoso. También los galápagos y tortugas pueden resistir más en el agua porque sus pulmones no tiene mucha sangre.

Errores de los filósofos antiguos

Como dijimos en el comienzo, algunos filósofos, según Aristóteles, han cometido ciertos errores al referirse a la respiración. Veamos algunos.

Anaxágoras: consideraba que los peces respiraban al expulsar el agua desde sus branquias. 

Diógenes: afirmaba  que los peces respiraban a través de aire del agua que les rodea la boca. 

Demócrito de Abdera: para éste filósofo la respiración servía para impedir que el alma se escapara del ser vivo, es decir, el sustento o la base de la vida es la inspiración y la espiración.

Empédocles: la respiración se da por medio de la sangre. Algunas venas tienen orificios abiertos al exterior y por ahí pasa el aire. Cuando la sangre se dirige hacia abajo, se produce la inspiración y cuando es hacia arriba la espiración(1).

Sin embargo esto es imposible porque nada de esto explica cómo pasa la espiración y la inspiración. Además, la inspiración y la espiración deben pasar por el mismo sitio para que se considere respiración. Los dos primeros filósofos solo mencionan la inspiración y no la espiración, de hecho, ellos dicen que a al vez que inspiran también espiran lo cual es imposible. Demócrito sólo se referían a los animales que tenían pulmones, pero además, más que por inspiración y espiración, la vida se acaba por vejez ya sea por violencia o causa natural. Finalmente, Empédocles pareciera no tomar en cuenta la nariz y la boca como los órganos por donde entra y sale la respiración. 

Los peces no respiran

Una de las razones de porqué los animales no respiran se debe a que no tienen tráquea. Y si no tienen tráquea, no tienen pulmón. De hecho, la estructura corporal de los peces se entiende por una unión entre su boca y su estomago.

Los animales que tiene pulmones y respiran pueden morir si son forzados a mantenerse en el agua por mucho tiempo. Los peces no pueden morir, pues no necesitan del aire para respirar. Por otro lado, ¿cómo es que los peces mueren cuando están fuera del agua? evidentemente no se da por falta de aire ni tampoco por falta de alimento. 

La respiración no sirve para la nutrición

Aristóteles rechaza enfáticamente que la respiración sea un tipo de nutrición. ¿Cómo se daría éste fenómeno supuestamente? Se dice que el fuego del cuerpo se alimenta del aire exterior, haciendo que el aire sirva como ''alimento'' de ese fuego. 

El primer error recaería en la falta de explicación para los peses, es decir, no explica la respiración de aquellos. Por lo demás, el aire no puede nutrir el cuerpo de ningún modo. 

El calor del cuerpo y del corazón

Debido a las disecciones realizadas en algunos animales en la época antigua, Aristóteles pudo determinar que el principio del cuerpo del animal es el corazón. Es el principio de todas las venas y de todo el calor que se distribuye a lo largo del cuerpo.

Respiración y vida

Hay ciertos animales que no tienen sangre y que su propio enfriamiento los protege del aire y del agua. Sin embargo,  El poco calor que contienen estos seres hacen que tengan una vida más corta, de hecho, el menor impulso podría quitarles la vida.

Por otro lado, hay insectos que son un poco más longevos como las abejas, las avispas, los abejorros y las cigarras. Según Aristóteles, las abejas pueden durar hasta siete años(2). La longevidad de estos insectos se deben a que tienen el diafragma hendido. Dichos insectos tienen un aire interior que les hace producir calor y con eso, el ruido característicos de los animales; el movimiento de este aire es suficiente para su refrigeración.

Ningún insecto puede respirar y eso se ve tanto en las moscas como en las abejas. Ellas pueden permanecer en el agua durante un tiempo y el hecho de que mueran ahí, es sólo porque se les llena el diafragma de agua. 

Refrigeración por medio de la respiración

Para los animales que no tienen sangre, la humedad y el aire ambiental es suficiente para su refrigeración. Para los animales con sangre la inspiración y la espiración es el método por el cual se refrigeran. 

Entre los animales que tienen pulmón con sangre se encuentran los vivíparos, y los que tienen el pulmón sin sangre pero esponjoso se encuentran los ovíparos. 

Refrigeración por branquias

Los animales que tienen branquias solamente necesitan el agua para refrigerarse. Las branquias son características de los animales acuáticos y que no tienen patas, sino más bien aletas. Quizás el animal que tiene patas y a al vez branquias es el tritón(3)

Así, queda establecido que la refrigeración por branquias se da por el agua y la de pulmones por el aire. 

Respiración y toma de alimento

Todos los animales necesitan de la respiración para su conservación y alimentación para su existencia. Sucede que en algunos animales la boca sirve tanto como para la respiración como para la alimentación.

La alimentación y la respiración no se dan al mismo tiempo en el animal, es decir, para alimentarse no hay que inspirar a la vez, pues se ahogarían. El trayecto del alimento pasa por la tráquea, luego por el esófago y finalmente por el estómago. ¿Cómo es que no se ahoga el animal si el alimento pasa por la tráquea? No se ahoga porque hay una estructura unida con la lengua llamada epiglotis, que al momento de tragar tapa los conductos de las vías respiratorias para que no pase el alimento por ahí. 

El caso de los cetáceos 

Los cetáceos son los animales marinos que tienen las aberturas nasales en la parte superior de su cabeza. Para refrigerarse, dichos animales no necesitan más que el agua, pero también tienen pulmones., su manera de respirar es salir a la superficie. 

Los moluscos y los crustáceos 

Las langostas y los cangrejos se ven suficientemente refrigerados por el agua circundante, por lo que no necesitan un órganos que los haga refrigerar. Estos crustáceos echan el agua para que después se puedan alimentar. Las sepias y los pulpos se refrigeran a través de a cabeza. 


Animales acuáticos y terrestres

Teoría de Empédocles

Según este filósofo, los animales acuáticos son los que tienen más calor y fuego por dentro. Se pensaba así porque seguramente para Empédocles sería imposible que un animal pueda mantenerse vivo con exceso de frío. Además, el filósofo afirma que estos animales nacieron en lo seco y que luego huyeron al agua. 

Para Aristóteles esto no es posible porque si fuera así, entonces dichos animales tienen que ser secos y no húmedos; por otra parte, sería imposible que pudieran correr hacia el agua dado que no tienen patas. Por último, no pueden ser más cálidos que los animales terrestres, pues los acuáticos carecen de sangre. 

Otra perspectiva en que se podría analizar lo dicho por Empédocles es considerar la dualidad de los contrarios. Claro, para sobrevivir en el invierno hay que abrigarse y en un verano abrumador tratar de refugiarse en la sombra. Pero no es el mismo caso con los animales acuáticos, no olvidemos que el agua extingue el fuego y sobre todo, si el agua está en una cantidad abundante; siguiendo esta lógica, los animales acuáticos no podrían sobrevivir porque su medio está lleno de agua y ellos están hechos de agua.

Por lo tanto, los animales están en mejores condiciones cuando su medio se acomoda con su materia correspondiente.

El corazón y el pulmón

Los que tienen pulmones necesitan gran cantidad de aire para refrigerarse. La influencia del fuego vital que tienen algunos animales no es suficiente para refrigerar, por lo que necesitan la influencia del aire, el cual es sutil y puede deslizarse más rápidamente por los pulmones. Así los animales que tienen pulmones y sangre respiran más, puesto que necesitan refrigerar más calor.

Relación entre corazón y pulmón

El ardor que produce el corazón en el cuerpo necesita de refrigeración dentro de los animales. La respiración se da con los animales que tienen tanto corazón como pulmón. Los que tienen corazón pero no pulmón se procuran refrigeración con las branquias. 


Formas de muerte

Todos los animales mueren pero unos los hacen por diferentes causas que otros. No obstante, la muerte natural y la muerte violenta es igual si se le coloca como género. Ya hemos explicado como los animales se mueren ya sea por exceso de calor, o por exceso de frío.

Ahogamiento

El ahogamiento ocurre cuando un animal acuático respira aire y un animal terrestre respira agua. Esto ocurre porque la refrigeración de los animales terrestres debe hacerse en el aire y no en el agua; en el sentido inverso, la explicación es la misma para los peces.

Acciones del corazón

Palpitación y latido

De acuerdo con Aristóteles, la palpitación es la concentración de cierto calor en el corazón. El latido es la evaporación de dicho calor en el corazón. La palpitación también surge como respuesta a la acumulación de frío, ayuda al cuerpo a mantenerse caliente.

Respiración

Esta se da en la parte donde está la facultad nutritiva del cuerpo. En efecto, el corazón se encuentra en medio de los pulmones. Cuando el corazón late es necesario que los pulmones también lo hagan pues los levanta. El aire que entra al cuerpo refrigera la parte que tiene exceso de calor, y es por eso que el aire del cuerpo sale caliente. 

Conclusión

Tratados bastante completos sobre los fenómenos naturales de los cuales somos conscientes directa o indirectamente. Hay algunos desaciertos en sus planteamientos, como insistir en que el cerebro es la región más fría del cuerpo humano, o que las abejas pueden vivir aproximadamente siete años. No obstante, si vemos los planteamientos anteriores, nos daremos cuenta que dichas teorías no eran tan solidas como las de Aristóteles. Nuestro filósofo tuvo que encargarse de todas y cada una de esas teorías y dar una solución más consistente y menos ambigua. 

jueves, 15 de octubre de 2015

Aristóteles - Breves tratados sobre naturaleza (Parte II: Sueño, ensueño y adivinación).

Los tratados de Física hablan de manera suficiente lo que es el movimiento. En el presente tratado veremos lo contrario de este, es decir, el estado de reposo en cuanto al sueño. ¿Qué ocurre cuando soñamos? ¿Nos transportamos a un mundo distinto? ¿Es acaso un delirio o una fantasía? Suele ocurrir que muchos soñamos con situaciones pasadas, situaciones improbables, situaciones raras y situaciones que acontecerán en el futuro (unas con acierto y otras no). ¿Será que realmente son mensajes divinos? ¿Son los dioses los que hablan a través de los sueños? Todo esto y más se verá en el siguiente apunte donde se reúnen estos tres temas, los cuales están muy relacionados.

Referencias:

(1) Para más información véase Acerca del alma.


BREVES TRATADOS SOBRE NATURALEZA


TRATADO III: 
ACERCA DEL SUEÑO Y DE LA VIGILIA

Sueño y vigilia


Sueño y vigilia son complementarios

El interesante fenómeno del sueño y la vigilia se da en una misma parte dentro del animal. Pertenecen a la dualidad de los contrarios tales como la salud y la enfermedad; la fuerza y la debilidad, etc. Una de las cosas que se debe entender entre el sueño y la vigilia, es que el estar despierto significa ''sentir'', aunque esto no significa que estar dormido no es sentir; de hecho, estar dormido representaría el sentir en potencia, mientras que estar despierto representaría el sentir en acto. 

Ambas afectan al cuerpo y al alma

Hemos de decir que el cuerpo y el alma están tan unidos como el sueño y la vigilia; aquellos están unidos por la sensación. Con respecto a las ''partes'' del alma que ya habíamos establecido en Acerca del alma, todos los animales pueden estar afectados pro el sueño y la vigilia pues nadie puede estar sin el alma sensitiva. 

Ambos se requieren mutuamente

Ningún animal está o despierto o dormido, necesitan de las dos afecciones para sobrevivir y además que todos los animales lo poseen.

Los animales no pueden estar en un estado permanente de sueño o de vigilia. Si el animal sobre pasa su capacidad de vigilia, tarde o temprano tendrán que dormir. Por otra parte, como dijimos anteriormente, el sueño es una sensación en potencia que tarde o temprano acabará en despertar, que es una sensación en acto. 

El sueño y las plantas

El sueño pareciera ser una atadura en el cuerpo, mientras que la vigilia es un tipo de liberación. Los únicos cuerpos que no son capaces de sentir sueño o vigilia, son las plantas debido a que no tienen sensación(1)

Naturaleza del sueño y la vigilia

Ahora analizaremos las causas del sueño, pues esto significa ver la mirada teleológica de la naturaleza, la cual siempre tiende al bien. El sueño, en efecto, es un reposo necesario para la conservación de los animales puesto que, éste contribuirá a la posterior movilidad en la vigilia. 

Causas físicas del sueño

Para que un animal reciba alimentación, necesita tener esa nutritiva del alma junto con el crecimiento. La causa final del alimento para los animales es la generación de la sangre y el principio de toda sangre es el corazón. Esto ocurre cuando el alimento se evapora dentro del cuerpo y se convierte en sangre hasta llegar al corazón. 

Generalmente, la parte nutritiva en el alma del hombre tiene sus mejores procesos a la hora del sueño. A la hora del sueño, el alimento va a la parte superior del cuerpo; una vez allí, se siente una especie de ''pesadez'' en la cabeza y posteriormente, sueño. 

A partir de lo señalado anteriormente, Aristóteles nos dice que las personas que tienen más peso en la cabeza son más propensos a dormir. Entre ellos están los enanos y los que no tienen venas en la cabeza.

Alimentos y el sueño

El sueño se produciría con más frecuencia después de comer; el vino también puede ser un tipo de narcótico. Como dijimos, el alimento sube hasta la parte superior y cuando no puede ascender más, se detiene, se enfría y luego es digerido. 

Intervención del cerebro

Así como el cerebro es la zona más fría del cuerpo, el proceso de refrigeración sucede justo ahí. El proceso de la condensación del alimento tiene similitud al ciclo del agua descrito en Meteorológicos. En efecto, la humedad llevada por el calor hacia el cerebro, la región más fría del cuerpo, la evaporación se condensa y se transforma en flemas. 




TRATADO IV:
ACERCA DE LOS ENSUEÑOS

Planteamiento del problema

¿Cómo es posible que podamos tener sensaciones en los sueños? Se supone que cuando se duerme los ojos deben cerrarse, y no es posible ver con los ojos cerrados. Lo que no es extraño es que podamos oír en los sueños puesto que los oídos no se cierran. Pareciera ser entonces que no podemos percibir los ensueños con los sentidos. Investiguemos estas interrogantes de los ensueños. 

El ensueño no se percibe por la opinión

El ensueño no se percibe a través de un juicio como la opinión. Como no podemos percibir los sueños por los sentidos (de acuerdo a lo expuesto en el punto anterior), cabría pensar que la opinión tampoco podría ocurrir en los sueños. 

Sin embargo, pareciera que la opinión junto con los sentidos sí están presentes, pues podemos hacer un juicio de las imágenes vistas en los ensueños. Quizás, lo que si se puede decir es que los sentidos pertenecen a los sueños de manera accidental y no absoluta. 

¿A qué facultad corresponde el sueño?

No obstante lo anterior, en los ensueños es posible tener sensaciones, así como también la percepción de captar imágenes. De esta forma, el sueño hasta ahora le corresponden dos facultades; la sensitiva y la imaginativa. 

Causa de los errores en la percepción

Es evidente que en las sensaciones existe una persistencia sensitiva, incluso cuando el objeto de dicha sensación no está presente. Aún más, las afecciones se hacen más potentes cuando poseemos la característica de esa afección; por ejemplo, el miedo en el cobarde, el amor en el enamorado. Debido a esto, el miedo nos hace ver enemigos y el amor a los amigos, lo que nos puede conducir a un error. Otra afección es la ira la cual nos lleva a errar muchas veces.

Movimientos que se producen en los sueños

Según Aristóteles, las sensaciones externas e internas suceden tanto en los sueños como en la vigilia. El movimiento que se da en los sueños pueden ser de manera violenta y otra normal. Cuando se da el normal es que podemos retener las imágenes que se presentan en los mismos, cuando se da el violento las imágenes desaparecen totalmente. 

Definición de ensueño

En definitiva, el ensueño es un tipo de imagen que se genera en el sueño. Pero no cualquier tipo de imagen o sensación, ya que pasa en algunos casos que se oye o se ve lo que efectivamente se produce en el momento de ''estar dormido''. Por ejemplo, cuando una persona escucha mientras está dormida y escucha pájaros porque efectivamente hay pájaros cantando cerca de él o ella. 


TRATADO V:
ACERCA DE LA ADIVINACIÓN POR EL SUEÑO

Una cuestión de dudosa credibilidad

Si bien el título de esta parte del tratado no se ve muy a favor de la adivinación, Aristóteles nos dice que no es bueno descartar la idea, y que incluso hay una razón verosímil para creer en aquello. Lo que si se descarta inmediatamente es que la divinidad ofrezca mensajes del futuro en los sueños. 

Los ensueños ¿causas señales o coincidencias?

Hemos visto con Aristóteles lo que son las causas, pero no las señales o coincidencias. En el caso de los sueños, las causas son como la luna que hace eclipse con el sol; la señal que la fatiga se de con la fiebre; y las coincidencias que el sol se eclipse cuando uno se está moviendo. 

Causas y señales

Una de las causas de lo que pasa en los sueños tiene que ver con las actividades que realizamos durante el día. Si hemos realizado una acción o estuvimos en proceso de realizarla, en los sueños se nos presentará dicha acción como un acto verídico. Del mismo razonamiento se puede ver que los sueños también serían señales. 

Coincidencias

Sin embargo, para Aristóteles los sueños son más coincidencias que causas y señales, sobre todo cuando se trata de hechos lejanos como batallas y guerras.

En cuanto a la adivinación es factible que estando conscientes hablemos de cosas que pasen en el futuro, y en efecto, pasan. ¿Por qué no ha de pasar igual en los sueños? En realidad, no hay ninguna diferencia. 

Así, que se mencione a una persona en determinado momento, no es señal ni causa de que luego esté presente, es más bien una coincidencia. Debemos tener en cuenta que los sueños muchas veces no se cumplen porque, al igual que en la conciencia, estos están sometidos al azar; pueden cumplirse como no cumplirse. 

Imposibilidad de origen divino

Por estar sometido siempre a la suerte, y además de surgir del propio animal, los sueños no tienen un origen divino. Quienes aciertan con sus sueños muchas veces también pueden errar. La adivinación es similar a las probabilidades de lluvia o sol que existen en la meteorología. Por lo tanto, la adivinación muchas veces no se cumple debido a que las señales corporales suelen fallar mucho. 

Teoría de Demócrito; ensueños en personas vulgares

Según Demócrito, las imágenes nos vienen a través de los poros para posteriormente entrar en los sueños. Es decir, las imágenes de los sueños aparecen debido a que entran en los poros. Aristóteles está  parcialmente de acuerdo con esta teoría, siempre y cuando dichas imágenes sean un conjunto de toda la experiencia realizada en el día. 

Conclusión

Con todos estos datos es factible pensar que la adivinación por el sueño no es probable. Aristóteles utiliza todo su sentido común (más que filosofía propiamente tal) para el estudio de estas materias, para de alguna manera, rebatir las antiguas concepciones de sus antiguos predecesores, especialmente a su maestro Platón y el mito de Er en el décimo libro de la República. Años más tarde Marco Tulio Cicerón abordará este mismo tema en el libro ''De la adivinación'', que en mi opinión tiene una explicación filosófica en contra de la adivinación. En general fue un libro interesante de analizar. 

domingo, 11 de octubre de 2015

Aristóteles - Breves tratados sobre naturaleza (Parte I: Sensación y memoria).

Continuamos con el análisis de la naturaleza con este tratado que exclusivamente, trata sobre las propiedades de los cuerpos. Este tratado es sobre pequeños libros sobre la naturaleza de los animales en general; por otra parte, también se analizan fenómenos psíquicos (los cuales la verdad son reducidos a explicaciones físicas) que nos ayudan a comprender un poco más de manera integral, lo que pasa con el animal frente a distintas sensaciones. El tema de este libro presenta uno de los esbozos de la psicología de Aristóteles que incluso se considera como el complemento de Acerca del alma. Veamos que nos puede seguir ofreciendo nuestro filósofo en cuanto a la naturaleza.

Definiciones:

(1) Sápido: que tiene sabor.

Referencias:

(1) Para que sean siete se debe unir el amarillo con lo blanco, o lo negro con lo gris. 
(2) No se mencionan cuales animales. 
(3) No pueden existir dos órganos con una función en común. 


BREVES TRATADOS SOBRE NATURALEZA


TRATADO I: 
ACERCA DE LA SENSACIÓN Y LO SENSIBLE

Introducción: atributos del alma

Ya habíamos visto con bastante detalle muchas de las características del alma en Acerca del alma. Ahora hablaremos de las actividades que realizan los animales y veremos como podremos clasificarlas.

Lo más importante que debemos destacar en lo sucesivo, son las siguientes cuestiones:

  • Vigilia y sueño
  • Juventud y vejez
  • Inspiración y espiración

Todos aquellos (junto con la salud y enfermedad) son sensaciones que corresponden tanto al alma como al cuerpo. 

Necesidad de sentidos en los animales; la vista y el oído

En el tratado sobre el alma, habíamos establecido lo imprescindible que es la sensación para los animales, de hecho, en esta parte Aristóteles nos dice que la sensación es lo que diferencia la vida de los animales (los que no sienten no pueden vivir). Por otro lado, otro sentido que necesitan es el gusto, puesto que este sentido se desprende de la nutrición. 

El olfato, la vista y la audición se da en los animales que pueden moverse. Estos sentidos los ayudan a discernir entre las cosas beneficiosas y destructivas; en fin, prolongar su conservación. Por otro lado, tenemos el entendimiento que ayuda a discernir sobre el bien y el mal, o sobre lo factible y lo inimaginable. 

La vista es un sentido de lo más importante para Aristóteles, si bien en el tratado precedente vimos que el tacto era el más importante, la vista nos ayuda a conocer las cosas tal como son, es decir, nos acerca más a la verdad que cualquier otro. La audición complementa la vista, lo que hace que sea mucho mejor el entendimiento; sin embargo, entre un ciego y un sordo, el más inteligente será el ciego, pues, para entender una lección, el sordo no podrá escuchar. 

Sentidos y elementos: la visión no es fuego


Platón y Empédocles: fuego interior en los ojos

Platón afirmaba en el Timeo que el fuego representaba la visión, ya que el ojo tenía un fuego interior que nos hace ver las cosas. Lo mismo decía el filósofo Empédocles.

Aristóteles no está de acuerdo con ninguno de los dos, en efecto, si hay una luz interior en el ojo ¿cómo es que este no puede ver en la oscuridad? No sólo eso. Empédocles nos dice que hay una luz que sale del ojo para que éste pueda ver (similar a una linterna). ¿Cómo es que no podemos ver esta luz del ojo en la oscuridad? 

Demócrito: la vista como reflexión

Una de las cosas con las que Aristóteles concuerda con Demócrito, es la de designar el elemento agua al ojo, pero no está de acuerdo con la reflexión de imagen del ojo. 

Dicha reflexión se produce a causa de los átomos que proyectan una imagen en el ojo del observador. La crítica a este planteamiento está en que la imagen no se produce en el ojo, sino más bien en la persona misma. 

Para Aristóteles, la visión se produce gracias a que el ojo, al estar hecho de agua, se vuelve transparente. Esta transparencia que tiene el agua puede retener las imágenes debido a que es más espesa (obviamente más que el aire). Que la vista sea de agua se puede evidenciar en el derrame de lágrimas. 

En general, no es posible afirmar que la vista se produzca por algo que sale del ojo, más bien es factible afirmar que es el mismo ojo el que ve. 

Concepción aristotélica de la visión 

El ojo está hecho de agua (como dijimos anteriormente) es transparente y es el receptor de luz en el alma. 

Cuando los soldados de guerra eran heridos en la sien y perdían la visión, estos declaraban ver sólo oscuridad. Esto pasó porque la herida quitó la transparencia al alma.  

Finalmente, para Aristóteles el ojo tiene origen en el cerebro, pues es este la parte más fría y húmeda del cuerpo.

Los sentidos de los elementos

Si pudiéramos relacionar cada uno de los elementos con los órganos del cuerpo, tendríamos que decir que el ojo corresponde al agua, el oído al viento, el olfato al fuego (pues el olor es una especie de exhalación como el humo) mientras que el tacto pertenece a la tierra. 

El gusto también es un tipo de tacto; estos dos se ubican cerca del corazón porque es la parte más caliente del cuerpo, al contrario del cerebro. 

Los colores

En el tratado anterior llamado Acerca del alma vimos que la luz era lo que permitía que el hombre pudiera ver los colores. 

Lo que se agrega a este respecto es que la transparencia tiene un límite en los objetos; dicho límite, por supuesto, es el color. Sin embargo, no es sólo el límite de los cuerpos, sino que también se puede decir que este mismo color corresponde la interior de los cuerpos.

Génesis de los colores: proporción o superposición; no emanación

De acuerdo con la filosofía aristotélica, los colores se forman gracias a las distintas combinaciones del negro y el blanco. Las proporciones en que se forman los colores pueden ser tanto desordenadas como ordenadas, similar a los acordes de la música.

Otra forma de que se generen los colores es a partir de la superposición de unos con otros. Por ejemplo, el sol que es amarillo cambia de color cuando lo vemos a través de una niebla o bruma, se vuelve rojo. Esto es debido a la combinación de la superficie y el fondo.  

Finalmente, Aristóteles considera absurdo que el color se de por emanaciones de los objetos. Lo que hace inconsistente esta teoría, es que los colores de un objeto se ven solamente por el contacto de la visión y la luz.

Teoría de la mezcla

La mezcla de colores se logra producir, así como también se puede producir la mezcla en los cuerpos. Dicha mezcla de los cuerpos se da por proporción de unidades mínimas como los hombres o los caballos. Por ejemplo, una mezcla de hombres y caballos formaría una caballería. De la misma manera se pueden formar otros colores, es decir, en el mismo sentido de la mezcla anterior.

Por lo tanto, la superposición de colores no es el auténtico motivo de que se formen múltiples colores, sino más bien su proporción. 

Los sabores: refutación de teorías

El sabor y el olor son afecciones muy similares, pero que no se producen en las mismas circunstancias. 

Entre los sabores, el agua es un elemento que tiene un sabor insípido. Empédocles nos decía que en las pequeñas e imperceptibles partículas del agua se encontraban las especies de los sabores. Sin embargo, Aristóteles argumenta que el sabor del agua cambia a causa del fuego. De hecho, los frutos cambian su sabor cuando se exponen al calor, aunque también se reconoce que el fuego (o el calor) es sólo una concausa del sabor. Esto se debe a que el agua cuando se calienta no necesariamente cambia de sabor.

Afectación del sabor del agua por la tierra

La relación entre la tierra y el agua es innegable. Los frutos salen de la tierra gracias a los riegos u otros fertilizantes que se usan hoy en día. 

El sabor de la tierra también varia en distintas formas; la sal es un tipo de tierra con cierto sabor. También cuando el agua se junta con la ceniza (que es un tipo de tierra) cobra un sabor amargo. En los vegetales se encuentra una extensa cantidad de sabores, puesto que en ese caso lo húmedo se mezcla con su contrario, lo seco. 

Ahora, si aquí interviene lo seco, entonces lo que interviene es el fuego (recordemos que el fuego es conjunto de calor y sequedad). 


Definición y características del sabor

En este apartado veremos la siguiente definición de la palabra.

Sabor: Afección producida en lo húmedo por la sequedad.

La afección mencionada en la definición se puede analizar desde lo que se entiende por potencia y acto, es decir, dicha afección puede cambiar el sabor en potencia a sabor en acto.

De esto se desprende que el alimento de los animales no es solo un elemento, sino más bien una mezcla. El alimento que es asimilado (o ingerido) por el animal es caliente o frío, ya que estos estados son los que producen el crecimiento y la destrucción. Estaría demás decir que para que el alimento sea asimilado necesita ser gustable, en otras palabras, dulce, ya sea solo o mezclado. 

Analogía entre la mezcla de colores y la de sabores

En el tratado anterior vimos que la mezcla de colores se da entre el blanco y el negro. En cuanto a los sabores, estos se dan entre la mezcla de lo dulce y lo amargo. Las mezclas que producen placer al ingerirlas, tienen que ver con la construcción de la proporción. 

De esta forma, tenemos que lo graso es dulce, lo salado es amargo, lo picante, lo acre, lo agrio y lo ácido están entre medio de los dos mencionados (dulce y amargo). Haciendo una analogía con los colores, Aristóteles propone lo siguiente. 

Amarillo y blanco: Dulce
Rojo: Picante
Purpura: Agrio
Verde: Acre
Azul: Ácido
Negro y gris: Salado o amargo

Así vemos que lo dulce y lo salado (o amargo) son los extremos de los sabores, y lo picante, agrio, acre y ácido conforman el intermedio. Aquí tenemos la escala de los siete colores y siete sabores (1). 

Los sensibles: crítica de Demócrito

Uno de los errores de Demócrito, según Aristóteles, es que éste decía que todo lo sensible es tangible. Sin embargo, esto no estaría acorde con el planteamiento visto en el segundo libro de Acerca del cielo, ya que ahí veíamos que existen los sensibles comunes; el movimiento, el reposo, la figura y el número, los cuales no son tangibles. 

Algo que se añade con respecto a estos sensibles comunes es que, estos si pueden engañarnos, mientras que los específicos no pueden hacerlo. 


El olor y sus causas

El tratado precedente dejaba claro que el olor puede presentarse tanto en el aire como en el agua. El olor vendría siendo un fenómeno seco sápido(1) en las cosas húmedas. Un ejemplo de esto es el mar, ya que este es húmedo y además seco por su sal. Cosas como las piedras, el oro, o el bronce son inodoros pues solo son secos. Tendrían que ser además húmedos para que tuvieran olor. 

Naturaleza del olfato: crítica a Heráclito

Muchos filósofos anteriores a Aristóteles, entre ellos Heráclito, afirman que el olor es un tipo de exhalación o de vapor. En cuanto a este último, podemos decir que es un tipo de humedad y exhalación humosa, y como vimos en el ciclo del agua, el vapor puede transformarse en agua y de ésta una especie de tierra. No obstante, el olor no pertenecería al vapor, ya que éste es solamente agua y la exhalación humosa no puede salir del agua. 

Analogía entre olores y sabores

En fin, podemos entender que el olor sería la mezcla de lo húmedo con lo seco. En cierto modo, el sabor está vinculado a los olores. Aristóteles nos dice que bien puede relacionarse el olor podrido con el sabor amargo. 

Además, recordemos que el sabor es una afección húmeda donde se produce sequedad, lo que quiere decir que de alguna manera los dos tienen las mismas propiedades, sequedad y humedad. 

Clases de olores

En el Timeo observamos que Platón afirmaba que nada tiene olor por sí mismo, es decir, que no existen las clases de olores. Sin embargo, Aristóteles nos dice que los olores pueden coincidir con los olores en dos categorías: lo agradable y desagradable. En efecto, cuando se tiene hambre, los olores de las comidas son agradables y cuando se está satisfecho, los olores de comida ya no son agradables.

Además, al contrario de la afirmación del Timeo, sí hay olores agradables por sí mismos. Basta ver que las flores despiden olores agradables sin que despierten apetito; todo lo contrario. Por otro lado, hablando de los alimentos, mientras estos sean sanos su olor siempre será agradable a las personas.


Olor con y sin inhalación

El olor se produce por inhalación en todos los hombres y cuadrúpedos en general. Dicha inhalación sirve principalmente para la respiración y secundariamente para percibir olores. 

Para el hombre, el olor agradable suele ser muy beneficioso porque entra en proporción con las cosas más frías del cuerpo, entre ellas, el cerebro. El hombre tiene solo un órgano que puede respirar y además la permite inhalar olores, pero también existen animales(2) que solamente perciben una clase de olores con un solo órgano(3). 

Por otra parte, según Aristóteles, existen animales que no respiran como los peces y los insectos. Estos animales tienen un tipo de olfato interno llamado ''olfato nutritivo''. 

Los pitagóricos y los olores nutritivos

Los pitagóricos afirmaban que hay animales que se alimentan de olores, pero Aristóteles no está de acuerdo. Los animales no son simples, son compuestos y por lo tanto deben alimentarse de cuerpos compuestos y no simples. Además el alimento debe ser necesariamente algo corpóreo y no sin cuerpo como lo es el aire. 

El olor sí es bueno para la salud del hombre, pero no tiene que ver con su alimentación.

Divisibilidad de las cualidades sensibles

Este es un tema que ya se ha tratado en la Física y por la que nuestro filósofos está completamente de acuerdo. Las cosas se pueden dividir fácilmente hasta al infinito, en contra de lo que establecen los atomistas. ¿Cómo es que no podemos ver las divisiones que quedan después de dividir tanto? Eso se debe a que la visión o los sentido no son capaces de ver dichas divisiones en acto, sino más bien en potencia. 

Las sensaciones no llegan a ser, sino que son

Esta es una duda que plantea dificultades. ¿Habrá un proceso por el cual se llega a sentir determinada cosa? Para Aristóteles este proceso no existe. Las sensaciones no pueden llegar a ser sino que son en el mismo instante que se producen.

Empédocles nos decía que los rayos del sol antes de llegar a nuestra vista, llega a un intermedio. Otro caso es el ruido, ya que se suele escuchar o confundir las palabras cuando el aire interviene en los sonidos (porque también estos se transmiten por el aire). Lo mismo ocurre con el olor. 

El caso de la luz 

La luz, acorde con lo dicho con Aristóteles, no es un movimiento sino más bien un acto. Podríamos decir que a la luz le pertenece el concepto de alteración más que de traslación. 

¿Es posible percibir dos cosas a la vez?

Es una pregunta compleja en cuanto a la sensibilidad. En todo caso, hay más certeza de percibir una cosa que dos; por ejemplo, el vino en su estado puro, la miel en su estado puto, etc. Más difícil es distinguir la mezcla de ingredientes en un alimento. 

Por otro lado, también es cierto que un movimiento de mayor intensidad podrá desplazar al de menor intensidad. ¿Podemos percibir los dos a la vez? según la mirada aristotélica, no. La única forma de percibir dos cosas a la vez sería en la mezcla, y ésta mezcla en realidad sería una sola si las dos se combinan. 

Acorde musicales

En la música suelen darse lo que llamamos acordes. Dichas estructuras dan la impresión de que son simultáneas cuando se tocan dos a la vez. Sin embargo, los músicos más experimentados de la época de Aristóteles decían que eso no era así, que en realidad los acordes se dan de uno en uno y no todos juntos, lo que pasa es que percibir eso es imperceptible para el hombre. 

Para Aristóteles, la existencia de un intervalo de tiempo imperceptible es imposible. Podemos percibirlo ya que todos estos tienen un comienzo, quizás, no es posible percibir lo grande que pueden ser estas percepciones. Si fueran imperceptibles, entonces no podríamos escuchar nada. 





TRATADO II: 
ACERCA DE LA MEMORIA Y DE LA REMINISCENCIA

Introducción: objeto de la memoria

En este tratado hay que diferencia entre memorizar y rememorar. Las personas más lentas son las que tienen mejor memoria y las que puede rememorar son más rápidas e inteligentes, ya que rememorar tiene que ver con la inteligencia. 

Teniendo esto en cuenta, analicemos lo que tiene la memoria como objeto. Evidentemente, no se puede ''recordar'' el futuro pues esto es lo que corresponde a la adivinación. Tampoco se puede recordar el presente, puesto que solo tenemos de él la percepción y no un recuerdo. Por lo tanto, el objeto de la memoria es exclusivamente el pasado y no los otros tiempos. 

Definición de memoria y su relación con el tiempo

La memoria no es un tipo de sensación o un juicio, sino más bien una afección o un estado. De modo que la memoria siempre implica un lapso de tiempo pasado. 

La sensación y la imaginación (entendida más bien como imagen) es fundamental para la memoria, es decir, la memoria no se da sin imagen. Por lo visto, la memoria puede pertenecer al intelecto y por lo tanto, no todos los animales la poseen. 

Memoria e imaginación

A la parte del alma que definitivamente sí pertenece la memoria es a la imaginación. Y en efecto, pareciera ser que lo que implica la memoria es una imagen; eso la vuelve más consistente. 

Lo que si debe tenerse en cuenta, es que la memoria no es un movimiento excesivo y rápido, ni tampoco uno muy lento. De hecho, los jóvenes no son capaces de retener por mucho tiempo lo memorizado y a los viejos les cuesta aún más porque unos son muy rápidos (los jóvenes) y otros muy lentos (los viejos).

Producción de recuerdos


Con respecto a la naturaleza de la memoria podríamos preguntarnos ¿recordamos una afección o lo que produjo la afección? Si fuera solo la afección, no podríamos recordar el objeto; si fuera solo lo que produjo la afección, ¿cómo resulta posible que recordemos el objeto estando ausente?

Así como la memoria es parte de la imaginación, la imagen que se queda en nosotros corresponde al recuerdo (o imagen) en sí mismo y también de otra cosa. Cuando el alma recuerda el objeto por sí mismo, entonces se nos viene una imagen y un pensamiento. Pero si se recuerda como el reflejo de otra cosa, entonces se nos viene un recordatorio o una copia de dicho objeto.

Una de las formas de conservar la memoria es el ejercicio de la contemplación, es decir, traerlo a la memoria una y otra vez observando dicho objeto no en sí mismo, sino que a manera de copia. 


La reminiscencia y el recuerdo

Una de las diferencias entre la memoria y la reminiscencia es que la primera se da por un proceso posterior a la experiencia, mientras que la reminiscencia. La acción de la memoria, por un lado, ocurre cuando dicha experiencia se ha olvidado. Finalmente, rememorar quiere decir rescatar el conocimiento científico y la sensación que se experimento, no un simple recuerdo. 

Mecanismo de la reminiscencia

La acción de la reminiscencia es rememorar, es decir, traer algún recuerdo a la memoria generalmente a través de la asociación de imágenes. Dicha asociación puede ocurrir tanto voluntaria como involuntariamente. 

Método para rememorar

Es obvio que para traer un recuerdo a la mente se debe comenzar por lo más próximo y no el más alejado a ese recuerdo, un punto de partida. También se puede hacer comenzando de múltiples puntos relacionados, pues lo que está unido tarde o temprano conducirá a lo que se desea buscar. Otro ejemplo podría ser el partir por recordar el lugar de lo que se está buscando. 

Por ejemplo, tengamos la siguiente secuencia: ABCDEFGHI. Puede ser que no se recuerde ''I'', pero puede recordarse E y si se recuerda ''E'' es posible que ''F'' y así quizás podamos llegar al recuerdo deseado.  

Diferencia entre memoria y reminiscencia

La reminiscencia, cronológicamente, es posterior a la memoria. Además, recordemos que el rememorar pertenece más a la inteligencia y la memoria a la imaginación. La reminiscencia necesita deliberación y es preciso que solamente el hombre pueda rememorar. 

Por último, la reminiscencia provoca en el cuerpo un estado ''emocional'' que nos ayuda a recordar de mejor manera lo que queremos recordar. 

Conclusión

Son realmente sorprendentes las aseveraciones de estos tratados. Cabe destacar las ideas contraria a su maestro Platón, sobre todo en la parte del intelecto y los sentidos; el primero puede engañarnos, mientras que el segundo no. Otra de las sorprendentes aseveraciones es la de la frialdad en el cerebro, según él, el órgano más frío del cuerpo. Por otro lado, es primera vez que leo algo tan práctico como postular un método de reminiscencia en algún texto de Aristóteles. En mi opinión, lo práctico en este filósofo no se da tanto como lo teórico.