lunes, 25 de diciembre de 2017

Principio de no-contradicción

Principio de no-contradicción

Este es uno de los principios más básicos de la lógica y la filosofía. Sin este principio se puede caer en bastantes confusiones y problemas lógicos con los cuales no podrían avanzarse (entre ellos paradojas). 

Los filósofos de la Antigua Grecia se encargaron primeramente en desarrollar este concepto, sobre todo los que vinieron después de Parménides.

Definición

Básicamente el principio de contradicción quiere decir que una declaración no puede ser verdadera y falsa a la vez. Por ejemplo, ''A es B'' y ''A no es B'' son mutuamente excluyentes, es decir, no puede ser verdad al mismo tiempo (i.e. A es B tanto como A no es B) porque sería ridículo. 

Filósofos en el principio de no-contradicción

Parménides

Es el mismo Parménides quien establece una distinción ontológica entre lo que es y lo que no es. En palabras de Parménides ''Lo que existe es y lo que no-existe no es''. 

  1. Lo que existe, es, puede pensarse y no puede no-ser
  2. Lo que no existe, no es, no puede pensarse y no puede ser


Lo de Parménides es muy claro, lo que existe existe para siempre y lo que no existe no puede llegar a ser, puesto que no existe. 


La crítica más temible es para Heráclito, pues si admitimos que el ser no puede no ser, entonces el cambio es inexistente. Para más información véase nuestra entrada ''Los Presocráticos''.

Platón 

En su alegoría de la caverna, Platón claramente demuestra dos mundos distintos que son contradictorios, que son de alguna manera incompatibles. También vemos algo parecido cuando se habla sobre el alma en el diálogo Fedón (o sobre el alma)

Recordemos que en este diálogo Sócrates conversa con Simmias y Cebes quienes le discuten sobre la inmortalidad del alma. Cuando Cebes le critica a Sócrates que el alma, con sus continuos movimientos en el cuerpo cada vez que se separa de él, podría desgastarse y morir. Es en ese momento que Sócrates establece que si consideramos al alma inmortal desde un principio, entonces no tendría caso hablar de ''muerte del alma'' por más que pase de un cuerpo a otro en una especie de ''desgaste''. 


Aristóteles en su metafísica ya decía lo siguiente:

''Nada puede ser y no-ser simultáneamente''

Además, si esto es así, cuando hablamos de un ser también hablamos de todo lo que él significa; por ejemplo, si se dice ''hombre bípedo'' también se dice que es un hombre que camina, que habla, que piensa, no por ser bípedo sino que por ser hombre y existir como tal. En palabras más lógicas, el hombre es y no puede no ser hombre si es.  


Como una especie de apoyo a la doctrina aristotélica, Avicena enfatiza que el principio de contradicción se entendería muy bien si a un hombre se le sometiera a golpes, y luego se le sometiera al fuego. Dicho hombre tendrá que aceptar que ser golpeado y no ser golpeado no es lo mismo; así como ser quemado y no ser quemado no son lo mismo. 

Conclusión

Por supuesto, muchos otros filósofos se han encargado de aportar al principio de no-contradicción a través de la historia. No obstante, el aporte y definición formal que dio Aristóteles fue al más duradera de todas las que se han formado. Es importantísimo el principio de no-contradicción que incluso en la cotidianeidad se ve cómo las personas violan este principio a cada momento. 

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